La época de sembrinas es especial para los niños por varias razones: una de ellas es la gran cantidad de caramelos que reciben. Aquí les dejamos cuatro excelentes consejos para proteger sus dientes y prevenir las caries asociadas al consumo excesivo de azúcar.
1. Evita los caramelos duros y pegajosos que se mastican por un largo tiempo. El verdadero problema son las bacterias que todos tenemos en la boca, no el azúcar en sí. Estas bacterias generan una serie de ácidos al entrar en contacto con el azúcar, y esos ácidos debilitan el esmalte de los dientes.
2. Mastica chicle sin azúcar después de comer. Eso aumenta el flujo de saliva, lo que neutraliza los ácidos producidos por la placa bacteriana. Puedes permitir que tus hijos mastiquen uno después de comer, solo asegúrate que sea sin azúcar.
3. Reparte los caramelos y permite que los coman con la comida. Nuevamente la razón es la producción de saliva que aumenta cuando comemos. No dejes que tus hijos coman todos sus dulces de una sola vez, mejor repártelos y dáselos con la comida.
4. Evita los refrescos, las bebidas deportivas, las aguas de sabores, los jugos industriales, etc. Todo lo que tenga azúcar añadido además de no presentar ningún beneficio alimenticio, aumenta muchísimo el riesgo de caries.